Quemaduras por fuego: Dado el reflejo de la oclusión palpebral, muy pocas veces las llamas tocan el ojo en forma directa en las personas concientes. Por esta razón, los mas dañados suelen ser los párpados. En caso de haberse dañado los párpado, se producirá una cicatriz retráctil y el ectropion correspondiente. Entiéndase por ectropion la evasión de los párpados hacia afuera. Cuando la quemadura llega al interior del globo se hará debridamiento conjuntival para prevenir la escolarización corneal , porque los vasos conjuntivales, al estar alterados invaden la cornea. Ante una quemadura palpebral , el primer auxilio a recibir e lavar con dos a tres litros de agua la zona comprometida. Luego la consulta con el especiaista se impone, los primeros minutos son cruciales.
Quemaduras por radiaciones ultravioletas: son muy graves, y la primera en comprometerse es la mácula. Al impresionar sobre la retina las raduiaciones ultravioletas , dado que no son visibles, no hay defensa para ella. Se producen con la visión de eclipses, las radiaciones ultravioletas, etc- Se deben usar lentes preventivos que filtren dichos rayos.
Quemaduras por radiaciones infrarrojas: El infrarrojo es la parte del espectro que tampoco entra dentro de la zona visible y su energía se transforma en calor al chocar contra un cuerpo que es capaz de absorberlo. Las lesiones por este tipo son por lo general profesionales y se ve en los soldadores, que padecen queratoconjuntivitis irritativas. El enfermo llega a la consulta por la noche con mucho dolor y los ojos cerrados por la intensa fotofobia, gran inyección conjuntival y edema de párpado
Quemaduras por ácidos: Los ácidos débiles solo producen irritación, los ácidos fuertes provocan coagulación de las proteínas, formando un pill o cáscara. Los álcalis son mucho mas graves ya que producen jabones al combinarse con los ácidos grasos. Estas son sustancias reblandecedoras que siguen actuando en profundidad. Lo fundamental es remover con agua abundantemente tanto en caso de álcalis o ácidos.